En Villa le Barone, la naturaleza, la belleza y la sostenibilidad se unen en perfecta armonía. Nuestros amplios jardines, las impresionantes vistas y el profundo compromiso con la responsabilidad medioambiental crean un refugio tranquilo donde los huéspedes pueden relajarse respetando y preservando el ecosistema circundante.
La finca se extiende sobre varias hectáreas y se encuentra en un entorno natural protegido. El amplio terreno cuenta con hermosos jardines de rosas, encinas centenarias, plantas mediterráneas y numerosos parterres que florecen durante todas las estaciones. Nuestras terrazas y jardines bien cuidados ofrecen múltiples rincones tranquilos donde podrá relajarse y admirar el encanto y la elegancia de este entorno tranquilo.
Desde cada rincón de los jardines se pueden contemplar unas vistas impresionantes de las ondulantes colinas de la Toscana. La pista de tenis domina la campiña intacta de Chianti, donde los viñedos y los olivares se extienden hasta donde alcanza la vista. Desde la piscina, los huéspedes pueden admirar la iglesia románica de Pieve San Leolino, mientras que el «Jardín de los Corazones» ofrece unas vistas espectaculares de Panzano in Chianti, el lugar perfecto para contemplar una romántica puesta de sol.
Si desea alojarse en un hotel verdaderamente comprometido con la protección del medio ambiente, ¡Villa Le Barone es para usted! Villa Le Barone está totalmente comprometida con la protección de su entorno natural. Para reducir nuestra huella de carbono: - Preservamos la biodiversidad evitando pesticidas y herbicidas nocivos, asegurando un entorno saludable para las aves, abejas y mariposas que prosperan en nuestros jardines. La piscina infinita es de agua salada, evitando el uso de cloro. Cada año, plantamos nuevos árboles, incluidos 400 olivos en 2020. Los arreglos florales frescos que dan la bienvenida a los huéspedes en sus habitaciones provienen directamente de nuestros propios jardines.
Si te gusta disfrutar de la naturaleza mientras haces deporte
